Realizar una compra o venta de local en Barcelona es sin duda una buena transacción, pues más allá de situaciones coyunturales y temporales que puedan incidir en su valoración o no, la verdad es que el suelo urbano de una ciudad como Barcelona es limitado, sus necesidades de locales muy amplias y según la localización de los mismos a prueba de riesgos cíclicos.
Evidentemente no cabe decir que cualquier local que se compre o que se venda en Barcelona sea una buena operación inmobiliaria por sí misma, pues dependerá de cada situación en particular, de cada local en concreto y de las múltiples variables y factores que a estos atañen, pero sin duda si a una de las ciudades se le debe dar valor en lo que locales se refiere esa es una ciudad como Barcelona.
Y ¿cómo escoger el mejor local en Barcelona? Obviamente también esta respuesta no tendrá un único signo, es decir, no se puede decir siempre que un local sea bueno o malo por sí mismo, dependerá del uso que busquemos, del coste que paguemos por él, y muchas otras variables que se deben tomar en consideración para poderlo evaluar adecuadamente.
Ahora bien, existen algunos puntos que resultan claves para analizar con carácter general si una compra ha sido buena o no, y no todas ellas tienen que ver exclusivamente con el importe que se ha pagado, con el valor de mercado. Y no es así, pues por ejemplo si a locales comerciales nos referimos, existen calles extremadamente céntricas y con precios desorbitados que no se pueden considerar precisamente caras, pues lo que aportan y su capacidad de amortización y crecimiento es enorme.
Otro de los puntos a valorar de los locales, además de su impacto y entorno comercial si se pretende dar este uso, es su entorno logístico, de transportes y servicios para locales no comerciales, es decir, su ubicación y aquello que esta ubicación nos posibilita, favorece y aporta.
